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DOBLE LLAVE – Disminuir la cantidad de desperdicios de alimentos en todo el mundo ayudaría notablemente a frenar el aumento de gases que producen el calentamiento atmosférico, según un estudio del Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto Climático.
Existe una discusión sobre las estrategias para reducir el desperdicio de comida y distribuirla de manera que llegue a países con menos recursos para ayudar a combatir la hambruna que afecta, por ejemplo, a los países de África.
Según el estudio, entre el 30 y el 40 % de los alimentos que se producen en el mundo no son consumidos, debido a que se estropean después de la cosecha y durante el transporte, o porque los comercios y consumidores los desechan.
Eloísa Oramas
Con información de La Nación.
Fotografía GettyImages.
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