Desde 2008, en Colombia se comenzaron a conocer casos de ejecuciones. El primero fue el de unos jóvenes del municipio de Soacha, contiguo a Bogotá, que aparecieron muertos en el noreste de Colombia.
En ese entonces, una investigación de la Fiscalía concluyó que dentro del Ejército operaba una red dedicada a buscar a jóvenes desempleados y drogadictos que eran llevados a diversas regiones bajo falsas promesas de tipo laboral.
Por ello la Fiscalía informó este martes sobre la citación de cuatro generales retirados del Ejército para que declaren por casos de ejecuciones denunciadas en diversos sectores del país.
Los implicados son Mario Montoya, que fue comandante del Ejército, y los generales retirados Ricardo Bernal, Jorge Salgado y Henry Torres.
En el caso del general Bernal, que fue comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta de Acción Decisiva del Ejército, un ex subalterno lo acusó de estar involucrado en la ejecución de 12 personas que fueron vestidas con uniformes camuflados para ser mostradas como integrantes de un grupo guerrillero.
El fiscal general, Eduardo Montealegre, reveló en abril pasado que más de 20 generales activos y retirados de las Fuerzas Armadas son investigados por su presunta responsabilidad en ejecuciones.
EC
Con información de dpa.
Fotografía Gettyimages.
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