DOBLE LLAVE – El rapero iraní Tomaj Salehi se enfrenta a una posible pena de muerte tras haber sido acusado por la administración de Justicia de Irán con el cargo de “corrupción en la tierra”, que engloba una serie de delitos contra la seguridad pública y la moral islámica, acusación y presunto delito que puede castigarse con la horca en el país persa.
El rapero y disidente, conocido por su nombre de pila Tomaj, se enfrenta además a las acusaciones de “propaganda contra el régimen, cooperación con estados hostiles, difusión de mentiras e incitación a la violencia”, informó este domingo la agencia de noticias oficial ISNA.
El músico ha mostrado su apoyo a las protestas que sacuden Irán desde la muerte el 16 de septiembre de Amini, tras ser detenida tres días antes por la Policía de la moral por llevar mal puesto el velo islámico, unas movilizaciones protagonizadas por jóvenes en las que se pide el fin de la República Islámica.
A finales de octubre fue detenido por “haber desempeñado un papel clave en la creación de disturbios, en llamados y el fomento de los recientes disturbios en la provincia de Isfahan así como en la ciudad de Shahinshahr”, indicó entonces el fiscal de la ciudad de Isfahán, Mohamad Musavian.
Pocos días después, la televisión estatal publicó un vídeo del músico en el que supuestamente confesaba sus delitos.
Las autoridades judiciales han acusado de diversos delitos a al menos 2.000 de los 15.000 detenidos, de los que seis han sido condenados a muerte hasta ahora.
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Gabriela Morales
Con información de agencias de noticias y medios internacionales
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