El primer ministro afgano, Nawaz Sharif, ha rechazado todas las ofertas de ayuda internacional
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La cifra de muertos a causa del terremoto registrado en la región del Hindukush aumentó este marte a más de 400, entre ellas 310 en Pakistán y al menos 115 en Afganistán, informaron las autoridades. Además murieron cuatro personas en los valles del Himalaya en la India, vecinos a Pakistán y China. «La cifra podría aumentar», señaló en Twitter el jefe de gabinete afgano, Abdullah Abdullah.

La principal dificultad ahora es llegar a las zonas afectadas, debido a que en los dos países numerosos caminos quedaron intransitables por los corrimientos de tierra. El primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, envió helicópteros a las regiones dañadas, pero miles de personas siguen atrapadas en áreas inaccesibles.

De acuerdo con fuentes oficiales, hay 4.000 viviendas dañadas en Afganistán y unas 2.500 en Pakistán, lo que obligó a cientos de personas a pasar la noche a la intemperie.

En Afganistán los equipos de rescate avanzan con lentitud en su intento por llegar hasta las víctimas. Aludes de tierra bloquearon las carreteras en la zona montañosa, y otras son intransitables porque las controlan los talibanes, afirmó Mawlawi Hamidullah Muslim, miembro del consejo provincial de Badajshán. Por su parte los extremistas llamaron «a todos los compatriotas de buena voluntad y a las organizaciones de ayuda a que no dejen de dar cobijo, alimentos y medicinas a las víctimas de este terremoto», a la vez que insta a sus muyahidines a colaborar con las víctimas y los equipos de ayuda.

El gobierno paquistaní desplegó helicópteros militares para tratar de llegar hasta los miles de personas que se teme podrían estar atrapadas bajo los escombros, indicó el ministro de Información, Pervaiz Rasheed. El Ejército envió además alimento y medicinas al distrito de Chitral, desde donde trasladó a los heridos a la capital Islamabad, en la primera misión de rescate desde el terremoto, informó en un comunicado.

Se espera que más helicópteros y aviones militares se desplacen a las zonas más inaccesibles del país, dijo Sharif. Las autoridades enviaron maquinaria pesada para abrir la principal autopista que une Pakistán con la vecina China, al tiempo que se intenta reparar otras carreteras y buscar posibles supervivientes, señaló el jefe de la autoridad responsable de las carreteras nacionales, Mushtaq Tarar.

El diario paquistaní Dawn informó que el gobierno ha enviado hasta ahora 2.000 tiendas de campaña y un hospital de campaña a la región. También se ha desplegado en Pakistán y Afganistán la Media Luna Roja.

Sin embargo, al pueblo de Chakdara, en el noroeste de Pakistán, no había llegado hoy ningún tipo de ayuda, contó a dpa Zaman Khan por teléfono. «Nuestras casas están destruidas. Estamos con niños y sin refugio. Alguien tiene que venir a ayudarnos». También en la ciudad de Dir, en la misma región, la gente pasó la noche a la intemperie esperando la llegada de ayuda.

Estados Unidos y la India, entre otros, ofrecieron ayuda, pero Sharif la rechazó dándoles las gracias. «Nuestros recursos propios son suficientes», dijo. También la ONU manifestó su disposición a ayudar en las operaciones de rescate si es necesario.

El pasado lunes

Un fuerte terremoto de magnitud 7,5 y registrado a una profundidad de unos 200 kilómetros ocurrió este lunes al norte de Afganistán, informó el Centro de Investigaciones Geológicas de Potsdam.

También el Servicio Geológico de Estados Unidos calculó la magnitud en 7,5 y señaló que se produjo a unos 70 kilómetros al sur de la ciudad de Faisabad, en una región que marca un triángulo fronterizo entre Afganistán, Pakistán y Tayikistán.

La cifra de muertes en Afganistán aumentó a 69, informaron fuentes oficiales. Tan sólo en la provincia de Kunar, en el este del país, «42 personas murieron y 67 resultaron heridas«, dijo el jefe de la policía provincial, Abdul Habib Sayedkhel, quien agregó asimismo que 2.039 viviendas quedaron «destruidas», por lo que se teme que la cifra de muertes aumente.

De hecho, al menos 12 alumnas de una escuela en la provincia de Takhar, en el norte de Afganistán, murieron en una estampida que se produjo por el pánico causado por el terremoto. Las jóvenes trataban de huir de la escuela, explicó el jefe del hospital provincial, Hafisullah Sapai, mientras que otros 39 alumnos resultaron heridos.

Los efectos del movimiento telúrico también se sintieron en zonas tan remotas como la capital paquistaní, Islamabad, donde la televisión cesó sus transmisiones.

Al menos 47 personas han muerto en lo que va de lunes en Pakistán por el terremoto, mientras que la cifra de heridos ronda los 400, informó el portavoz de la Oficina de Gestión de Catástrofes, Reema Zuberi. Fuentes médicas indicaron que 200 heridos están siendo tratados en el hospital central de la ciudad de Peshawar, en el noroeste del país.

Incluso en Cachemira, en el norte de la India, se cortaron las redes de telefonía móvil, pues el temblor se sintió también en Nueva Delhi y también en la capital de Nepal, Katmandú.

EC y AG

Con información de dpa.

Fotografía REUTERS/Stringer.

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