Caravanas en varias ciudades de Brasil solicitaron la destitución de Bolsonaro

DOBLE LAVE – Este sábado 23 de enero en al menos 50 ciudades de Brasil, con caravanas de vehículos y bicicletas, diversos movimientos sindicales y sociales solicitaron la destitución del presidente Jair Bolsonaro. Los protestantes pidieron que el mandatario sea llevado a un juicio político por su gestión de la pandemia del Covid-19, la cual estiman fracasada e inconveniente.

Desde los vehículos las personas protestaron con sus bocinas, también llevaban banderas y carteles con mensajes en contra del presidente. Además, apoyan la toma de medidas efectivas en contra del coronavirus que se realizaron en distintas ciudades del país sudamericano.

Los protestantes buscan que el Congreso brasilero discuta alguna de las 57 peticiones de apertura de juicio político para destituir al mandatario, las cuales fueron presentadas a la Cámara de Diputados.

Bolsonaro no considera grave el Covid-19

Cuestionaron a Bolsonaro por su postura frente a la gravedad del coronavirus. Él negó la gravedad de la enfermedad y la calificó como “una gripecita”. También se opone a las medidas de distanciamiento y tapabocas, adicional a esto afirma que la efectividad de las vacunas no está comprobada.

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, niega el peligro de la crisis sanitaria por SARS-CoV-2, por lo que muchos ciudadanos muestran su descontento con él

Las manifestaciones de este sábado fueron convocadas a través de las redes sociales. Los partidos de izquierda, centrales sindicales y las coaliciones Frente Brasil Popular y Pueblo Sin Miedo, llamaron a las personas a protestar en contra del jefe de Estado.

Los medios destacaron que la presencia de las personas no fue multitudinaria, como ocurrió en otras manifestaciones contra el ejecutivo nacional, esto se debía a que los organizadores convocaron a las personas para que asistieran en sus automóviles, evitando aglomeraciones y prevenir la propagación del virus.

Para los frentes Brasil Popular y Pueblo Sin Miedo, el presidente representa un impedimento para que el país sudamericano pueda superar la crisis actual. Por lo tanto optan por presionar al Congreso para que juzgue las acciones de Bolsonaro y se debata una posible destitución.