Agentes de la Guardia Civil española detuvieron a 17 presuntos integrantes de una red china dedicada al tráfico ilegal de personas, que introducía en España a mujeres a las que explotaba sexualmente.
Las víctimas eran trasladadas desde China a España con documentación falsa y enviadas después a otros países como Reino Unido, Suiza y Canadá. Algunas de ellas eran forzadas a ejercer la prostitución, así como a consumir drogas y venderlas a sus clientes, señalaron las mismas fuentes.
La investigación reveló que la organización actuaba en España desde el año 2011 y que obtenía aproximadamente unos 10,8 millones de euros en beneficios ilegales cada año.
La operación realizada este lunes primero de julio, que se saldó con 17 detenciones y el registro de 11 propiedades en la región de Cataluña (noreste), fue realizada por más de 200 agentes de la Guardia Civil e investigadores del servicio de Inmigración del Reino Unidos, apoyados por Europol.
Durante los registros se incautó dinero en efectivo, teléfonos móviles, pasaportes falsos, ordenadores y otros documentos.
Con información de dpa
Fotografía Gettyimages
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