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La Organización Internacional para la Energía Atómica (OIEA) y Kazajstán sellaron este jueves la creación de un denominado «banco de uranio», un almacén en el que los miembros del organismo podrán adquirir uranio bajamente enriquecido para uso civil en centrales atómicas.
El proyecto se desarrollará a lo largo de los dos próximos años en la ciudad de Öskemen, en el este del país, informó el director general de la OIEA, Yukiya Amano, durante la firma del acuerdo. El ministro de Exteriores kazajo, Erlan Idrissow, aseguró que se trata de un paso histórico para la seguridad nuclear.
Con la creación de este almacén la OIEA quiere limitar la diseminación de la tecnología atómica. La idea es evitar que todos los países con energía atómica construyan sus propias plantas de enriquecimiento de uranio, ya que esas instalaciones también podrían utlizarse para producir combustible para armas nucleares. Ese fue uno de los principales puntos de discusión en la disputa nuclear con Irán.
La construcción del almacén de uranio, que costará unos 150 millones de dólares (130 millones de euros), se financiará con donativos. Kazajstán, que es uno de los principales productores de uranio, se ofreció voluntario para albergar el depósito.
AG
Con información de dpa.
Fotografía Gettyimages.
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