¿Cómo escoger la mejor idea de negocio?

La mejor idea de negocio para cada persona debería estar basada en sus intereses, habilidades y modo de vida. Tal y como explica el libro Encuentra tu punto de equilibro («Find Your Balance Point»), por el coach de negocios Brian Tracy y el terapeuta Christina Stein, el verdadero éxito se logra cuando tus acciones se guían por tus valores, visión, propósito y objetivos.

1. Escoge algo que disfrutes hacer: Si tu pasión es el cambio social, deberías convertirte en un emprendedor social. No decidas emprender con tecnologías innovadoras que otros creen pueden hacerte millonario, ni un área de negocios con el que no estés familiarizado.
2. Nació sin esfuerzos: Si sientes que la idea se te ocurrió fácilmente o no te costó definir los detalles, es una buen negocio para ti. Ahora debes estudiar el tamaño del mercado, modelos de negocios y mercadeo.
3. Ansías aprender cada vez más: Tener una idea es solo el comienzo, luego debes seguir los pasos que te llevarán al éxito y satisfacción. Es necesario poder disfrutar de los aprendizajes. Si solo ves estrés en el futuro, busca una nueva idea.
4. Cuando la idea te absorbe, las horas pasan volando: Si te gusta lo que haces, no te quejarás de las largas horas en la oficina. Además, tampoco sentirás que el trabajo es un trabajo.
5. Trabajar en tu negocio te da energía: Cada quien tiene diferente maneras de energizarse. Busca una idea que te llene de potencia y te motive.
6. Te esfuerzas por venderla y comunicar su valor: Los empresarios inteligentes desarrollan lanzamientos rápidos para sus ideas y están siempre ansiosos por hablar sobre ellas. A los inversionistas no les suele atraer que el fundador de una empresa envíe a personal de mercadeo para que discutan posibles estrategias de negocios.
7. Te gusta asociarte con las personas más importantes en el medio: La satisfacción de un emprendedor viene en parte por la posibilidad de interactuar y aprender de personas a quienes se respeta. Examina tus ideas con ellos y observa sus respuestas.

Encontrar el punto de equilibrio entre el trabajo y la vida personal no es fácil, pero es fundamental para el éxito y la felicidad a largo plazo. Igualmente, alcanzar tus metas laborales es igual de importante que cuidar de tu salud y relaciones personales. Nunca se puede satisfacer a todos, por lo que debes empezar por satisfacerte a ti mismo.

AG

Con información de Forbes.

Fotografía Gettyimages.