DOBLE LLAVE – A través de un informe de la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) y Provea, quedó registrado la “grave crisis alimentaria que vienen padeciendo los venezolanos”, debido a las políticas públicas de la administración de Maduro.
“Después de muchos años de silencio, el gobierno de Maduro empezó a reconocer la gravedad de la crisis. La implementación en 2019 de la dolarización informal y la liberalización focalizada han disminuido la escasez de productos vivida los años anteriores, pero muchos de estos son inasequibles para la mayoría de la población cuyos ingresos son en bolívares, no en dólares”, resaltó Provea en su portal web.
En este documento, Provea y FIDH indican como la pobreza “se ha incrementado exponencialmente, llegando al 94,5 % de la población en 2021”. Además, indican como el PIB en el país “se ha contraído en más del 80 %”, lo que representa una de las contracciones más violentas en materia económica del continente, fuera de contextos de enfrentamientos bélicos.
A esto se suma un cuadro hiperinflacionario de más de tres años, agravando la inseguridad alimentaria. El resultado de estas condiciones económicas ha sido el desarrollo de una emergencia humanitaria compleja.
El hambre sigue latente en Venezuela:
La ayuda humanitaria es criminalizada
La canasta básica es incansable con salario mínimo
La falta de servicios afecta la alimentación
La corrupción sigue generando hambre
El derecho a la alimentación vulnerado#16Mar https://t.co/3t8I4FhlxU pic.twitter.com/2IOqfXx6Sq— PROVEA (@_Provea) March 16, 2022
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Con información de medios nacionales
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