DOBLE LLAVE – La «bonificación del salario» recién anunciada por el presidente Nicolás Maduro, que eleva a 100 dólares el «ingreso mínimo integral indexado» (IMII) para empleados públicos mediante bonos mensuales sin generar pasivos laborales, lo cual será publicado oportunamente en la Gaceta Oficial de Venezuela, y que de alguna manera toma en cuenta a jubilados y pensionados, ha sido objeto de críticas y opiniones adversas por parte de organizaciones no gubernamentales (ONG), gremios, sindicatos y dirigentes opositores.
Perspectiva de ONG Provea
Provea, una influyente ONG, destacó que millones de obreros y jubilados en Venezuela reciben «un salario mínimo y una pensión de hambre». Según estimaciones independientes, estos ingresos no alcanzan para cubrir la canasta básica de alimentos para una familia de cinco personas, valorada en más de 500 dólares mensuales.
Henrique Capriles habla de burla y falta de soluciones económicas
Henrique Capriles, dos veces candidato presidencial, no dudó en calificar el anuncio como una burla. Para él, este bono no resuelve los problemas económicos ni aborda la falta de poder adquisitivo que afecta a millones de venezolanos.
Sus críticas resaltan la percepción generalizada de que esta medida no aborda los desafíos económicos más amplios del país.
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Gabriel Velásquez
Con información de medios nacionales, internacionales y redes sociales
Fuente de imagen referencial: Archivo
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