Un estudio reveló que la fructosa y la glucosa tienen efectos diferentes en el organismo, siendo unos perjudiciales para la salud
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DOBLE LLAVE – Un equipo internacional de científicos del Centro de Investigación Biomédica en Red -Fisiopatología determinó por medio de un estudio, hecho con animales de laboratorio, que el tipo de azúcar que se consume desarrolla distintas enfermedades metabólicas y cardiovasculares.

El consumir fructosa en vez de glucosa tiene un impacto perjudicial para el metabolismo y el sistema vascular. Este componente es azúcar simple que abunda en las frutas, y es el más usado por la industria alimentaria, ya que es más barato de producir y endulza con más facilidad.

Para llevar a cabo la investigación, se usaron ratas hembras por el hecho de ser más sensibles a las alteraciones metabólicas. Las mismas fueron divididas en dos grupos durante dos meses sumado a su dieta habitual de alimentos sólidos; a un grupo se le dio complemento líquido de glucosa y al otro un complemento de fructosa.

Una vez que finalizó el estudio, se determinó que existían diferencias destacables en el aumento de peso corporal, el nivel de los triglicéridos y la fisiología vascular en los animales.

El grupo que consumió fructosa, mostró una alteración elevada en concentración de triglicéridos en el plasma, bajos niveles de una enzima clave para la oxidación de los ácidos grasos y aumento de la expresión de una proteína esencial para exportar triglicéridos del hígado.

«Todo esto nos lleva a pensar que, de forma específica, la fructosa es capaz de reducir la oxidación de ácidos grasos e incrementar la salida de triglicéridos del hígado en el plasma, y eso es lo que probablemente origina la hipertrigliceridemia», explicó la coordinadora del estudio.

Por otra parte, en el grupo que consumió glucosa la capacidad de la aorta para relajarse era superior, mientras que los que consumieron fructosa era menor. Esta última sustancia, genera un efecto negativo al dificultar la correcta relajación de la arteria, pero la glucosa es beneficiosa.

«Después de muchos años estudiando los efectos de la fructosa y su particular metabolismo, no es sorprendente descubrir que tenga efectos que no presentan otros azúcares similares como la glucosa. Aunque parezca que el incremento de peso solo esté relacionado con el aumento de calorías consumidas, sabemos que hay otros factores», señaló Alegret.

Angélica Rodríguez.

Con información de Yahoo.

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