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El USB Killer 2.0 es un lápiz de memoria, creado por un hacker ruso conocido como «Dark Purple«, que destruye equipos enviando una descarga eléctrica a través de sus circuitos con dos objetivo: infectarlo de virus o dañar el hardware en segundos.

Cuando el dispositivo se conecta al puerto USB del ordenador, se inicia una transmisión de corriente eléctrica a los condensadores, la cual finaliza en el momento en que estos alcanzan niveles determinados de carga. Una vez que llega a este punto, el condensador se transforma en una fuente de tensión, descargando instantáneamente 220 voltios sobre el puerto al que está conectado, tomando en cuenta que el voltaje máximo soportado por un puerto USB es de 5 voltios.

Para prevenirlo es importante ser muy cuidadosos con todo lo que se conecta a las computadoras y considerar todos los mecanismos de prevención personal, para evitar una descarga si una persona mantiene contacto con el dispositivo y el puerto de forma directa al momento de conectarlo.

Este dispositivo no solo es capaz de destruir ordenadores, sino también televisores, consolas de videojuegos y teléfonos móviles que cuenten con la tecnología USB OTG (USB On The Go). Por tanto, los métodos para evitar correr riesgos deben ser bien examinados, no solo por el propietario de estos aparatos, sino por los integrantes de la familia con el fin de evitar resultados que los pueda afectar.

NG

Con información de BBC Mundo.

Fotografía Gettyimages.

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