DOBLE LLAVE – La ONU advirtió en Ginebra que al menos 250 mil sirios podrían morir de hambre al este de Alepo, esto lo indicó luego de que se distribuyeran las últimas raciones de ayuda alimentaria y los grupos humanitarios no tienen acceso a la zona.
El este de Alepo está custodiado desde principios de julio por las fuerzas del Gobierno de Bashar al Assad, con ayuda de los bombarderos de Rusia. «Es una situación horrible», indicó Jan Egeland, enviado de la ONU para acciones humanitarias en Siria.
Asimismo, explicó que la semana pasada la ONU solicitó a las partes que le dejarán entrar para proveer comida, medicina y personal sanitario, así como la evacuación de unos 300 pacientes junto con sus familias.
Por otra parte, el viceprimer ministro ruso, Serguei Riabkov, afirmó este jueves que Rusia mantiene su «pausa humanitaria» de bombardeos sobre el este de Alepo, informó la agencia de noticias rusa Interfax.
Sin embargo, según Egeland, los continuos combates terrestres hacen que sea imposible llevar ayuda. Además, las partes en conflicto impusieron condiciones que complicaron aun más los esfuerzos de la ONU.
«No he visto otro lugar donde haya habido tanta politización y manipulación de la ayuda como en Siria«, expresó Egeland durante una comparecencia e instó a Rusia y a Estados Unidos, que apoya a los rebeldes moderados, a utilizar su influencia para desbloquear la operación humanitaria.
«Las partes que están respaldando a las partes sobre el terreno tienen que ayudarnos más», solicitó.
Angélica Rodríguez.
Con información de dpa.
Fotografía REUTERS/Abdalrhman Ismail.
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