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Durante el debate en el Parlamento de Francia sobre la reforma de la Constitución que solicita extender el estado de emergencia, el primer ministro galo, Manuel Valls, aseguró que gracias a las medidas especiales habían frustrado un nuevo atentado.

El representante de Gobierno aseguró que los planes terroristas pudieron detenerse gracias a las revisiones sin orden judicial que solo se permite en el estado de emergencia.

El gobierno francés quiere extender tal estado, que se inició a raíz de los atentados del viernes 13 y está en vigor hasta fines de febrero, la Asamblea Nacional votará el 16 de febrero si aprueba extender la medida por otros tres meses.

Valls aseguró que durante el estado de emergencia se realizaron en total de tres mil 289 registros domiciliarios sin orden judicial, donde fueron detenidas 341 personas y se incautaron 560 armas. Además, se abrieron 571 procedimientos y 407 personas fueron puestas bajo arresto domiciliario.

Organizaciones de derechos civiles, como Amnistía Internacional (AI) o Human Rights Watch (HRW), acusan al Gobierno de actuar desproporcionadamente. La oposición por su parte asegura que las acciones apenas condujeron a iniciar investigaciones por sospecha de terrorismo.

Tras los atentados hechos por el EI, el presidente François Hollande anunció una reforma constitucional que anclaría el estado de emergencia en la Carta Magna. Dicha medida permitiría una actuación más rápida al Gobierno, dotándole de amplios poderes especiales.

La reforma prevé también que se pueda retirar la nacionalidad francesa a quienes sean condenados por terrorismo.

Yelimar Requena

Con información de dpa.

Fotografía  REUTERS/Charles Platiau.

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