En Sudán del Sur corre la sangre

Human Rights Watch (HRW), organización internacional dedicada a velar por los derechos humanos, denunció este miércoles 22 de julio que el ejército de Sudán del Sur y milicias aliadas mataron sin motivo a unos 60 civiles, entre ellos niños y personas mayores, en la zona norte rica en petróleo. Las víctimas fueron colgadas, fusiladas o quemadas en vida. Otras 63 personas fueron violadas por soldados y milicianos, a veces reiteradamente.

Debido a la violencia, numerosas personas se vieron desplazadas de la región. Muchas huyeron a una base de las Naciones Unidas en la ciudad de Bentiu, otras a bosques en las cercanías. De acuerdo con diferentes estimaciones, en los últimos 18 meses hubo dos millones de desplazados.

El Estado más joven del mundo se hunde en el caos desde que escaló una lucha de poder entre el presidente Salva Kiir y su ex vicepresidente Riek Machar. El conflicto también tiene un trasfondo étnico.

Para su informe de 42 páginas, Human Rights Watch entrevistó a 170 sobrevivientes y testigos. Las atrocidades se registraron entre abril y junio, durante una ofensiva militar contra posiciones rebeldes en el estado de Unity.

LS

Con información de dpa.