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El presidente del Barcelona, Josep María Bartomeu, y su predecesor en el cargo, Sandro Rosell, se negaron a declarar ante la justicia española sobre el fichaje de Neymar.
Bartomeu y Rosell fueron citados por la Audiencia Nacional en Madrid y ninguno quiso contestar a las preguntas del fiscal José Perals y el juez José de la Mata. Ambos son investigados por delitos de corrupción entre particulares y estafa en el fichaje del jugador del Barcelona.
La investigación nació de la demanda presentada por la empresa DIS, que tenía parte de los derechos federativos de Neymar y la cual se sintió estafada al conocer el falseo que se presentó en el traspaso entre los equipos Barcelona y Santos.
Bartomeu y Rosell ratificaron ante el juez lo que ya habían declarado en febrero de 2015 en relación a dicha demanda interpuesta por un aficionado, al conocer que Neymar presuntamente le costó al Barcelona 83 millones de euros (90 millones de dólares), cuando el club había indicado que el traspaso del jugador había costado 17.
En febrero de 2015, Bartomeu declaró como imputado por un delito fiscal y afirmó que él no negoció ninguno de los contratos para fichar a Neymar, debido a que su antecesor ya se había encargado. Rosell por su parte, explicó que él se limitó a firmar los contratos que le dieron los servicios jurídicos del club porque se fiaba de ellos.
Para mañana se espera la declaración de Neymar, citado como investigado junto a su padre, Neymar Da Silva Santos, y su madre, Nadine Gonçalves Da Silva, aunque los padres del jugador podrían evitar comparecer ante el juez De la Mata, tras haber solicitado declarar en Brasil.
Natasha Guevara
Con información de dpa.
Fotografía REUTERS/Andrea Comas.
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