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DOBLE LLAVE – La censura en Internet es una realidad en países con regulaciones legales estrictas para sus ciudadanos como China, Rusia y Etiopía; y aunque existen redes privadas virtuales (VPN – Virtual Private Network en inglés), la Organización No Gubernamental Amnistía Internacional (AI), alerta que están en peligro y que su bloqueo afectaría gravemente la libertad de expresión.
Joshua Franco, investigador sobre tecnología y derechos humanos de AI aseguró que ve con preocupación que grandes empresas como Google retiren la mayoría de las aplicaciones de VPN en China porque dichas redes requieren la autorización del Gobierno.
“El cifrado y el anonimato brindan a los individuos y a los grupos una zona de vida privada en línea para sostener opiniones y ejercer la libertad de expresión sin injerencia o ataques arbitrarios o ilegales. Una conexión VPN, o el uso de un servidor proxy, combinado con el cifrado, es tal vez la única manera en que el individuo puede acceder a información o compartirla en entornos donde predomina la censura», dijo el relator especial sobre la promoción y protección del derecho a la libertad de opinión y de expresión, David Kaye.
Asimismo, Franco expresó que «Internet es también un medio clave para buscar una comunidad y apoyo» y catalogó a los servicios de conexión anónima como «salvavidas» y por eso condenó que Apple también siguiera el ejemplo de Google.
«Las herramientas de conexión anónima pueden también proteger los derechos políticos«, declaró el miembro de AI y calificó de «lamentable» lo habitual que se está volviendo la práctica de los gobiernos de bloquear o cerrar páginas web que difundan información de comicios electorales, manifestaciones en su contra u otros eventos delicados.
Al mismo tiempo reiteró que «las empresas tienen la responsabilidad de respetar el derecho internacional de los derechos humanos, con independencia del cumplimiento por el Estado de sus propias obligaciones en materia de estos derechos».
Finalmente, el experto hizo un llamado a la comunidad internacional a impulsar «el acceso sin trabas» a la comunicación y que ésta sea libre de la «severa censura» que está tras los medios de comunicación audiovisuales o impresos porque si los gobiernos limitan el acceso a la web ésta «será un lugar menos inclusivo» y habrá cada vez menos información.
Alejandra Watts / @alejandra_watts
Con información de Amnistía Internacional.
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