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En los últimos tres meses 21 presos fueron asesinados en cárceles de El Salvador, producto de purgas entre las pandillas que allí se conocen como «maras», afirmaron este jueves fuentes oficiales. El último caso ocurrió el lunes pasado en el penal de Izalco, al occidente del país centroamericano, donde cuatro reos fueron asesinados, de acuerdo a un informe de la Fiscalía General de la República (FGR).
En El Salvador existen 19 cárceles que albergan a 29.500 reos, cuando la capacidad es sólo para 8.000 personas, según fuentes oficiales, por lo que el hacinamiento es de más del 300%, una de las causas generadoras de violencia, según investigaciones de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) del país.
La FGR, entidad que investiga la acción criminal, informó que el lunes en la noche se cometió la masacre luego de una trifulca entre pandilleros presos.
El 22 de agosto pasado 14 reos del penal de Quezaltepeque, departamento de La Libertad, fueron asesinados por supuesta purga entre pandilleros de la denominada «Mara 18, facción revolucionarios».
Entonces el fiscal general Luis Martínez aseguró que la orden de masacrar a los reos fue enviada desde otro centro penitenciario, el cual se encuentra en Gotera, al oriente de El Salvador.
Entre otros casos, en el centro penal de Cojutepeque, departamento de Cuscatlán, las autoridades de la Dirección General de Centros Penales (DGCP) reportaron, el 14 de septiembre pasado, el homicidio de 3 pandilleros.
AG
Con información de dpa.
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