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DOBLE LLAVE – Un tribunal federal de Manhattan ratificó este miércoles la sanción de cuatro partidos de suspensión para el estelar quarterback de los New England Patriots, Tom Brady, por el escándalo del «Deflategate» que ensombreció el fútbol americano en 2015.
Las autoridades rechazaron la solicitud de Brady y del sindicato de jugadores de la NFL, quienes reclamaban una nueva audiencia por el caso. No obstante, el cuatro veces campeón del fútbol americano agotará todas las opciones y se espera que apele ante la Corte Suprema de EE.UU.
Brady había sido absuelto a principios de septiembre por el famoso caso de las pelotas ilegalmente desinfladas, pero la justicia decidió en abril reinstalar la suspensión.
El mariscal de campo es acusado de estar al tanto de las maniobras que empleados del equipo utilizaron para boicotear el partido donde vencieron a Indianápolis Colts en enero de 2015 para acceder al Super Bowl y posteriormente titularse campeón al vencer a los Seattle Seahawks.
Tras una investigación, la NFL consideró en mayo que la implicación de Brady en el escándalo suponía una «conducta perjudicial» para la integridad de la liga, y lo sancionó por cuatro encuentros. Sin embargo, un juez del distrito de Nueva York levantó el castigo en septiembre, justo antes del inicio de la última temporada.
La decisión, sin embargo, fue recurrida por la Liga y Brady deberá cumplir su castigo un año después, ya que según la NFL, el MVP de 2015 «conocía al menos de modo general las actividades inapropiadas» de dos empleados encargados de rebajar el aire por debajo de lo permitido.
Una pelota con menos aire del reglamentado es más fácil de agarrar, sobre todo en condiciones meteorológicas adversas de lluvia y frío, como las de aquel domingo de enero en Foxborough, cerca de Boston, donde Indianápolis perdió la posibilidad de ir a la final.
Yelimar Requena
Con información de dpa.
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