By 
La cadena de comida rápida abrió una franquicia en un edificio histórico de la ciudad de Hangzhou, al este de China. Ubicada cerca del famoso West Lake, la casa de campo de 84 años de antigüedad alguna vez alojó al exlíder taiwanés Chiang Ching-kuo.
El empresario local Shen Chunlei, dueño de una empresa de planificación de bienes raíces, obtuvo el contrato de arrendamiento, renovó la casa de campo y abrió el McCafé el pasado 15 de noviembre.
Los medios estatales informaron por primera vez los planes de renovación en enero, lo que desató la ira pública. Muchos lugareños lo condenaron como un acto occidental de profanación cultural. Pero la medida no viola la ley china, dijo un funcionario local de la Oficina de Reliquias Culturales de apellido Wang.
El punto de venta de comida y bebida, propiedad de McDonald’s, ha sido enmarcado por la opinión pública como un clásico ejemplo de cómo las culturas occidentales invaden China y los propietarios de negocios profanan las antiguas casas de campo.
Esto refleja una controversia similar que estalló en 2000 cuando la cadena de café Starbucks abrió una sucursal en la antigua Ciudad Prohibida de Beijing, que cerró en 2007. Pero la historia del McCafé de Hangzhou se complica más por la historia del edificio y la burocracia local.
Mientras que el exterior del edificio se mantiene sin cambios, en el interior el McCafé está decorado con carteles sobre la vida de Chiang, tal y como lo solicita la Oficina de Reliquias Culturales local.
Wang dijo que abrir el McCafé es un uso eficiente de un edificio que hasta ahora generalmente ha estado cerrado al público. «Desde nuestro punto de vista, tenemos la esperanza de utilizar plenamente su valor público, convirtiéndolo en un museo y que se abra al público. Pero eso no significa que no pudiera ser comercializado. La ley no prohíbe eso, y la tienda de café cumple con los criterios de planificación municipal. Después de todo, no es un restaurante«, agregó.
EC
Con información de agencias.
Fotografía Gettyimages.
Comments