Lo supuestos hechos ocurrieron entre 1985 y 1993
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Mientras el Papa Francisco, nacido en argentina, se mantiene de gira por algunos países de Sudamérica, un coterráneo suyo, supuestamente también “entregado a Dios”, fue procesado por la justicia argentina en búsqueda de esclarecer si abusó sexualmente de unos 50 niños y adolescentes que concurrían a un establecimiento educativo religioso.

El procesamiento fue impuesto al cura Justo José Ilarraz por el delito de «promoción a la corrupción agravada de menores» que asistían al Seminario Menor de Paraná, ciudad ubicada a casi 500 kilómetros al noroeste de Buenos Aires.

El delito que se le imputa al sacerdote fue cometido entre 1985 y 1993, y advertido hace tres años por un periódico local que obtuvo el testimonio de algunas de las víctimas.

Durante su investigación, la jueza de Paraná, Paola Firpo, tomó declaración por escrito a las autoridades religiosas de la región, entre ellos se encontraba Estanislao Esteban Karlic, actual cardenal en Roma.

El sacerdote, por su parte, desmintió la acusación y aseguró que todo se trata de una suerte de plan de venganza impulsado por una de las supuestas víctimas.

Tras las primeras denuncias la Iglesia católica sancionó a Ilarraz con el destierro a otra provincia argentina.

Las víctimas tenían entre 10 y 14 años cuando, según declararon, se abusó de ellas. Como consecuencia, dijeron que sufren «padecimientos psíquicos y espirituales».

LS

Con información de dpa.

Fotografía Gettyimages.

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